En la entrada pasada, estuvimos analizando los criterios de valoración de las oposiciones de Andalucía. Uno de los bloques, el dedicado al temario, presenta criterios que deben guiarnos y orientarnos en su correcto desarrollo. El temario de lengua castellana y literatura juega un papel muy relevante en la formación y cualificación en todos los niveles de las oposiciones. En este artículo explicaremos la importancia de preparar un buen temario con el objetivo de marcar la diferencia en las oposiciones.
Un aspecto muy importante: la estructura del tema
Una buena estructura, con un índice ordenado y estructurado en epígrafes, devuelve la imagen de la claridad expositiva de los contenidos .Un aspecto básico es el de estructurar los bloques puesto que algunos de ellos pertenecen a diferentes parcelas de conocimiento. Incluso dentro de la misma interrelación, es fundamental saber diferenciar los aspectos tratados con un sentido unitario y coherente. Como decimos, algunos de los temas sintetizan bastos conjuntos de conocimiento científico de la Lingüística, la Gramática, la Pragmática o la Literatura.
La introducción y la relevancia del tema tratado
Debemos justificar la importancia del tema en relación a los contenidos científicos de la parcela a la que pertenece, por un lado, y a su valor en el engranaje pedagógico y didáctico, por otro . Por esta razón, hemos de identificar la singularidad y relevancia del tema en el marco la disciplina en la que se incardina. Otro aspecto es el que apunta a su fundamentación didáctica y curricular en el contexto de su aplicación al aula. Conectar el tema con la normativa y ofrecer propuestas pedagógicas interesantes para su desarrollo en las clases son dos elementos muy valorados.
Desarrollo de los apartados teóricos
Ya en el índice ofrecemos una imagen nítida de los aspectos que desarrollaremos después en orden de concordancia con dicho esquema . Estos apartados deberán presentarse en virtud de su relevancia en la parcela de conocimiento a la que pertenecen. El tratamiento monográfico nos obliga a sintetizar en dos horas lo más importante de cada una de las disciplinas tratadas. Su óptica y enfoque dependerán, por tanto, de vuestra habilidad para interrelacionar sus puntos más relevantes.
Una conclusión bien desarrollada
La conclusión es el broche de oro para un tema de calidad. Con ella ofreceremos una síntesis de la síntesis anterior, es decir, de los contenidos fundamentales que hemos desarrollado. El sentido de la conclusión ha de establecerse en orden de pertinencia y secuencialidad con dichos contenidos. Aunque lo normal es que apuréis el tiempo hasta el final, no os podéis dejar en el tintero este apartado, pues, de otra manera, perderéis la calificación que le corresponde.
Un adecuado basamento bibliográfico
Hemos explicado en más de una ocasión el papel protagonista que asumen las fuentes bibliográficas. Frente a una bibliografía artificial y extemporánea, ofreceremos un sistema de referencias bibliográficas que dominamos y conocemos. Por supuesto, ni que decir tiene que la valoración de la bibliografía académica responde al principio de cohesión con el desarrollo conceptual y teórico: las bases del apoyo bibliográfico deben estar presentes a lo largo y ancho del tema tratado, revelándose como uno de sus ejes vertebradores más originales.
Las referencias legislativas
Desde el momento de aparición de la actual Ley educativa, LOMLOE, asumimos el reto de actualizar nuestro temario a esta legislación. Consideramos que este planteamiento es beneficioso y productivo por dos motivos:
- Ofrecer un temario fresco y vivo, que responde al principio de actualidad.
- Acrecer las ventajas de un desarrollo comprometido con la actualización, que aporte el plus de diferenciación que debe tener un temario de calidad.
El nivel de profundidad científica
Conectado con el apartado de la bibliografía, exponemos nuestros contenidos de manera clara, coherente y fiel al asunto tratado. Hemos de enfocar y desarrollar los conceptos y contenidos en orden de concordancia con el propio título del tema. Para ello, nos guiaremos por la propia enunciación del tema, pues nos ofrece una imagen fiel de los grandes bloques teóricos que deberemos desarrollar.
Otros aspectos no menos importantes
El uso de una terminología adecuada a la parcela de conocimiento que estamos tratando, la claridad y el orden expositivos, una correcta expresión, por supuesto, sin errores ortográficos, la secuenciación coherente, un apoyo constante en argumentos científicos de reconocida autoridad, etc. son elementos capitales que despliegan sus efectos positivos a lo largo de todo el tema.
Actualizaciones y cambios del temario
Según estuvimos analizando en una entrada pasada, uno de los proyectos del actual gobierno es el de cambiar el temario de oposiciones vigente, por considerarlo desfasado y desacorde con la realidad educativa de nuestros días. Lo cierto es que, a corto plazo, no pensamos que vaya a producirse un cambio repentino de temario de cara a las oposiciones de 2024 y 2025.
Elegir el temario adecuado no es una cuestión de confianza, sino de buenos resultados
El primer paso que soléis dar en el inicio de la preparación es el de elegir y estudiar un temario que os inspire confianza. Nuestra recomendación es que seleccionéis un temario que cuente con el aval de haber obtenido calificaciones sobresalientes, amén de la brevedad de los temas y su correcto enfoque.
En nuestros años de preparación hemos conocido casos de opositores que salieron de la prueba del tema contentos y con un buen sabor de boca y a la hora de la verdad se dieron de bruces con una mala calificación. A algunas de nuestras opositoras les sucedió lo contrario: terminaron el tema con la sensación de no haber podido escribir todo lo que querían y , sin embargo, sus calificaciones fueron elevadas.
¡Muchísima fuerza y confianza en vuestras posibilidades!