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La semana pasada la Consejería de Desarrollo Educativo y FP de Andalucía publicó los criterios de valoración de las oposiciones. Conocer estos criterios de valoración es muy útil para entender los puntos más importantes en la valoración del tema y la unidad didáctica.
Rúbricas para la valoración del temario de oposiciones
Estructura del tema

Este bloque estructural absorbe 1 punto de la calificación total de las oposiciones de lengua y literatura de Andalucía, y se reparte entre ítems tales como el índice (adecuado, paginado y secuenciado), la justificación conceptual y legal del tema y su encuadre normativo y científico.
Los criterios de valoración de las oposiciones de profesor de lengua y literatura de Andalucía, disponen apartados de desarrollo de contenidos, conclusión y bibliografía están fuertemente interrelacionados. El desarrollo conceptual y teórico dimana de la bibliografía que, a su vez, determina el enfoque y la perspectiva que otorgamos al monográfico. Siempre decimos: el sistema de citas bibliográficas debe ser coherente y realista. En este sentido, la compilación bibliográfica final ha de conectar con las referencias que fundamentan el desarrollo teórico del tema.
Expresión y presentación
En estos criterios de valoración del tema localizamos aspectos relativos a la terminología empleada, la expresión, la profundidad conceptual de las palabras, la presentación limpia, clara y ordenada y la corrección, por supuesto, ortográfica, léxica y gramatical en la plasmación de los contenidos.

La masa de calificación: los contenidos del tema
En efecto, los indicadores de logro incardinados en el plano de los contenidos acaparan 8 puntos de la calificación total. Hemos hablado siempre del papel preponderante de los contenidos sobre el resto de apartados. El tema ha de mostrar rasgos de profundidad, densidad conceptual, conocimiento y variedad de saberes, enfoques y ópticas.

Destacamos el criterio de valoración que apunta a que “realiza más de tres citas normativas y bibliográficas”. Venimos insistiendo en la relevancia de la dimensión que conecta el contenido científico del tema con su fundamentación pedagógica y didáctica: “aplica los contenidos al contexto escolar y/o profesional/laboral”.
Criterios de valoración de la unidad didáctica
Comentamos, en primer lugar, los aspectos relacionados con el contenido escrito y, en segundo lugar, aquellos otros que conectan con la exposición y defensa.
El primer apartado, indica que la unidad debe adecuarse a la etapa, nivel, curso y grupo al que va dirigida. Este requisito, que a menudo soslayamos por obvio, ha de interpretarse en el contexto teórico perteneciente al diseño de unidades adecuadas al nivel y graduadas en dificultad al curso en cuestión.
La contextualización del grupo-aula, muy importante para los docentes de lengua y literatura, determinará el diseño pedagógico de la unidad didáctica , sobre todo en lo que afecta a la inclusión educativa, tan importante en la enunciación de los criterios de valoración de las oposiciones de Andalucía y, en general, en el resto de comunidades autónomas.
Justificar la pertinencia e importancia de la unidad didáctica son dos aspectos que operan en la dimensión de su motivación y génesis pedagógica desde el punto de partida del currículo académico (primer de concreción curricular) y su contribución a los objetivos generales de las diferentes Leyes, Decretos, Órdenes, etc.
La adecuación a la realidad y la contextualización al centro y al entorno definen unidades didácticas que evitarán un exceso de idealismo o un desarrollo extemporáneo o descontextualizado de la realidad.
Asimismo, debéis tener muy en cuenta aspectos relacionados con la coordinación y las ramificaciones interdepartamentales. La unidad didáctica deberá “(precisar) la práctica del profesorado implicado, así como de las materias, ámbitos y/o módulos implicados.”
Incluir ocho importantes apartados curriculares
Importante incluir TODOS los siguientes elementos estructurales, que son algo así como la médula espinal de la UD (8 dimensiones en total):
1. Descripción.
2. Centro de interés.
3. Competencias específicas, básicas, objetivos o resultados de aprendizaje.
4. Secuencia didáctica.
5. Metodología.
6. Evaluación.
7. Principios/Orientaciones pedagógicas .
8. Atención a la diversidad.

El núcleo de la defensa: la estructura de la presentación de programación didáctica y unidades didácticas de Enseñanza Secundaria y Bachillerato
Precisamente, en estos elementos curriculares encontramos los puntos que luego intervendrán en el desarrollo de la defensa (8 puntos):
- Presentación e introducción de la unidad didáctica, poniendo de relieve la pertinencia de su estudio y justificando su importancia académica.
- Centros de interés y elementos de motivación de la UD: relación con asuntos de actualidad, conexión con problemas concretos, movilización de habilidades y destrezas, adecuación a casos reales y contextualizados, etc.
- Descripción exhaustiva de los objetivos, elementos de enlace y transferencia de conocimiento, eje temático, etc.
- Interrelaciones (apartado fundamental) entre objetivos didácticos, criterios, competencias, descriptores operativos, criterios y saberes básicos. Todo ello debidamente temporalizado.
- Integración de aprendizajes con los saberes básicos curriculares y su puesta en marcha a través de actividades, tareas, etc. y su conexión con otras áreas y materias.
- La secuenciación didáctica es fundamental: en la PD temporalizamos para un curso académico y en la unidad didáctica para un número de sesiones que debemos secuenciar y planificar de forma adecuada al tiempo y al propósito de cada una de las sesiones. Realizar una adecuada secuenciación exige arte y ciencia.


La tarea de la secuenciación didáctica consiste en segmentar las acciones metodológicas, temporalizándolas adecuadamente en las sesiones asignadas a la UD. La secuenciación se entiende así como la división del programa metodológico global y su desarrollo. Este ejercicio incluirá un continuum de actividades, tareas, compenetración de saberes a través de trabajos de todo tipo, que han de ser colaborativos, integradores, interdisciplinares, etc. con el objetivo de conseguir un desarrollo holístico del proceso educativo.
¿Y la rúbrica de Atención a la Diversidad? Una densa y completa normativa para los profesores de lengua y literatura de Andalucía
En la relación de rúbricas se echa de menos un apartado con los criterios para la valoración del apartado de atención a la diversidad . Tan solo documentamos una pequeña mención a ella en el apartado de la metodología: “En el desarrollo de la actividad del aula se contemplan las medidas generales y específicas de atención a la diversidad.”.
Convenimos en que la dimensión de la inclusión educativa conecta con el bloque de la metodología, pero también con otras esferas y apartados curriculares cuales son los contenidos /saberes y la evaluación, es decir, con los apartados medulares de la unidad didáctica.