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¿Contextualizamos? 6-3-2020

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    En la medida en que avanzamos en el estudio de los periodos literarios en la preparación del examen práctico de oposiciones de lengua y literatura tenemos que ampliar la perspectiva textual. En la nueva composición ya apreciamos rasgos que nos separan de épocas precedentes.

    Oriental

    Dueña de la negra toca,
    la del dorado monjil,
    Por un beso de tu boca
    Diera a Granada Boabdil.
    Diera la lanza mejor
    Del Zenete más bizarro,
    Y con su fresco verdor
    Toda una orilla del Darro.
    Diera las fiestas de toros,
    Y si fueran en sus manos,
    Con las zambras de los moros
    El valor de los cristianos.
    Diera alfombras orientales,
    Y armaduras y pebetes,
    Y diera…. -¡que tanto vales!-
    Hasta cuarenta jinetes.
    Porque tus ojos son bellos,
    Porque la luz de la aurora
    Sube al Oriente desde ellos,
    Y el mundo su lumbre dora.
    Tus labios son un rubí
    Partido por gala en dos….
    Le arrancaron para ti
    De la corona de un Dios.
    De tus labios, la sonrisa,
    La paz, de tu lengua mana….
    Leve, aérea como brisa
    De purpurina mañana.
    ¡Oh, qué hermosa nazarena
    Para un harén oriental,
    Suelta la negra melena
    Sobre el cuello de cristal,
    En lecho de terciopelo,
    Entro una nube de aroma,
    Y envuelta en el blanco velo
    De las hijas de Mahoma!
    Ven a Córdoba, cristiana,
    Sultana serás allí,
    Y el Sultán será ¡oh Sultana!
    Un esclavo para ti.
    Te dará tanta riqueza,
    Tanta gala tunecina,
    Que has de juzgar tu belleza
    Para pagarle, mezquina.
    Dueña de negra toca
    Por un beso de tu boca
    Diera un reino Boabdil;
    Y yo por ello, cristiana,
    Te diera de buena gana
    Mil cielos, si fueran mil.

    El orientalismo del universo literario de Zorrilla

    Bajo el título genérico de Orientales, Zorrilla escribió doce poemas cuya lectura nos trasporta a un momento histórico repleto de sensualidad, riqueza y lujos perdidos y, además, de un erotismo sensorial. Los románticos españoles e incluso extranjeros, escritores, dibujantes y poetas, trataron de recuperarlo  en viajes a España y sobre todo, a Andalucía. Entendían que se podían vivir aventuras sin tener que exponerse a los peligros del Norte de África. Egipto o Turquía.

    La persistencia de la literatura del Siglo de Oro

    Aún persistía el recuerdo de la literatura del siglo de Oro: Calderón de la Barca, El Quijote, el romancero viejo, y, sobre todo el paisaje y la arquitectura árabe: mezquitas y alcazabas, palacios y fortalezas, es decir, todas las ruinas conservadas de lo que quedó del califato de Córdoba,  Al-Andalus y la resistencia del Reino de Granada. Este repertorio de evasión y orientalismo nos recuerda a El sueño de Polífilo del que hablamos en otra entrada.

    La evasión: tema fundamental de la literatura romántica

    He aquí que el mundo literario de Zorrilla no podía escapar de lo que era constante de época: la evasión, el deseo escapista, el impulso hacia lo desconocido y lo fantástico. Paisajes otoñales, primaveras melancólicas… han sido atribuidos como marcos de idealización y melancolía desde el romanticismo más pleno y absoluto. Desde este punto de vista, la reelaboración manifiesta de ciertos motivos alejados del origen: el orientalismo y el orfismo, resultan extraños y sorpresivos para la época en la que nos encontramos. El espíritu romántico atormentado se evade mediante una analepsis histórica en la que se encuentra la visión más pura y auténtica del espíritu romántico.

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